martes, 18 de diciembre de 2007

Volvamos la vista hacia un mundo de alegrias




Dijo una vez Jorge Manrique:

Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando,
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.

Quizás olvidemos muchas veces este detalle, pero siempre en cualquier época el hombre recuerda el pasado con añoro y una visión nostálgica. Nuestros agridulces tiempos de instituto son añorados. Trabajos odiados son recordados con cierto gusto. Y lo que una vez estuvo cerca de nuestra destrucción luego es recordado con una cierta nostalgia. Siempre antes se vendía, mas. Las cosas eran mas baratas y se vivía mejor. Pero también siempre nosotros hemos sufrido mas que los mas jóvenes, hemos padecido mas penurias y nos han puteado mas. Señores no nos engañemos. Las cosas no pueden ir mejor y peor a la vez. Nuestra mente nos engaña. Nos confunde y nos da por culo. Y todo por que de esa manera es la única de ser felices. Es la única de poder decir, bueno ya volverán los viejos tiempos.

También Manrique nos dio la respuesta.

No se engañe nadie, no,
pensando que ha de durar
lo que espera,
más que duró lo que vio
porque todo ha de pasar
por tal manera.

Por ello que nadie desespere, ni nadie desfallezca solo siguiendo hasta el final puedes avanzar y no es que todo este peor es que sencillamente las cosas cambian. Los que antes iban a un sitio ahora a otro. Todo esta mal pero en cualquier lugar puedes encontrar tu sitio. Como otros hicieron mucho antes.


"Cuando la felicidad de te viene al paso nunca aparece con la forma que una la espera"



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